Sandra Campuzano: “El mundo digital carece de límites y las enfermeras no estamos sabiendo utilizarlo”

La enfermera y especialista en comunicación y publicidad presenta en Educa-Med una videoconferencia gratuita sobre ‘Enfermería y marketing’

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Sandra Campuzano es enfermera y experta en gestión, comunicación y publicidad. Su afán por ayudar a mejorar y reforzar la presencia digital del sector enfermero se ha traducido en iniciativas como el canal de Telegram ‘Club Marca Enfermera’, que gestiona junto con Pedro Soriano y que cuenta con casi 500 suscriptores. El próximo 22 de febrero ofrecerá una videoconferencia gratuita a través de Educa-Med bajo el título de ‘Enfermería y marketing’.

PREGUNTA.— ¿Puede explicar a grandes rasgos cuáles serán los puntos fundamentales que tratará en su videoconferencia?

RESPUESTA.— Voy a hablar sobre la enfermería y el marketing. Parecen en principio dos conceptos muy separados porque el marketing se suele entender como publicidad pura y dura. Sin embargo es una herramienta que debemos utilizar y conocer todos los sanitarios porque nos permite planificar y dar un mejor servicio al usuario, que es el que compra nuestro producto.

P.—¿Por qué cree que históricamente las enfermeras no se han sabido ‘vender’?

R.— Somos un colectivo un poco especial en el que ni siquiera las propias enfermeras saben muy bien qué son las enfermeras. Nos encontramos en un mundo digitalizado en el que salen nuevos canales de difusión y resulta aún más difícil explicar qué es una enfermera. Si supiéramos utilizar de una forma planificada la comunicación sería una gran herramienta para nuestro liderazgo como producto sanitario. No estamos accediendo a puestos de responsabilidad o en los que seamos actores activos del sistema porque la imagen que ofrecemos está en ocasiones más cerca de la caridad que de la profesionalidad. Eso sucede porque no nos hemos esforzado en fomentar una percepción del colectivo acorde con lo que somos. Y nosotros somos titulados de carrera, muchos son incluso doctores en la materia, y sin embargo la imagen que seguimos ofreciendo y tolerando muchas veces no se corresponde con los estudios que tenemos. No se nos ve como expertos o especialistas. Hay otras profesiones que lo hacen muy bien, como pueden ser los arquitectos o los ingenieros. Nosotros tenemos la misma formación y no somos capaces de trasladarla. El marketing es una herramienta que nos permitiría utilizarlo de una forma clara y directa.

P.— ¿Cuáles son las herramientas básicas de marketing que debería dominar cualquier enfermera?

R.— Por supuesto, las mismas que debe dominar cualquier persona titulada, sea o no enfermera. Son las herramientas que tienen que ver con el mundo ‘offline’: entrevistas en los medios clásicos, radio, prensa escrita y televisión, a lo que ahora se añade un nuevo canal que son las redes sociales y todo lo que tiene que ver con el mundo digital. Los dos son complementarios, pero se añade ese factor extra con las redes digitales y es ahí donde tenemos una brecha muy importante. Las personas que ahora mismo ocupan puestos de responsabilidad en entidades muy potentes en muchos casos no conocen el mundo digital. Y lo que es peor, con frecuencia ni entienden lo importante que es conocerlo. Ya no se trata de que sepas utilizar una red, sino que conozcas de su existencia.

P.— ¿Cree que las enfermeras en general saben aprovechar el potencial de las redes sociales?

R.— No. Ahora mismo se ve como una amenaza. El momento en el que se decretó el confinamiento y hubo que utilizar los medios digitales como tablets, teléfonos, etc., la gente tuvo que aprender de golpe. En muy poco tiempo hubo que enseñar a todo el mundo cómo se utilizaba un iPad para poder dar servicio no ya a nosotros, sino a los pacientes. Hubo que aprender de golpe, pero ello no implica que se haya producido una correcta transferencia de conocimientos. El mundo digital permite infinidad de posibilidades que nosotros estamos aún por descubrir. Deberíamos poder usar una red social como TikTok, que está ahora de moda, es muy rápida y gusta mucho, para hacer educación sanitaria. Permite subir vídeos de un minuto, ideales para hacer pedagogía continua. Sin embargo, ni las administraciones, ni siquiera el propio personal de enfermería, lo ve como una oportunidad. Podríamos estar dando altas o recomendaciones a través de redes de una forma legal. Y es que es posible utilizar cualquier red para llevar a cabo todo esto y educar y empoderar a los pacientes, y ahora resulta muy difícil. Los propios pacientes buscan información en internet y no existen todavía figuras consolidadas que puedan discriminar información entre lo que es veraz y lo que no. El mundo digital no tiene límites y nosotros no estamos sabiendo utilizarlo.

P.— ¿Le parece que este tipo de videoconferencias y las formaciones online serán el futuro en un plazo no muy lejano?

R.— Pienso que sí. La formación continua telemática tendría que ser no para los primeros niveles de formación —lo que se conoce como el ‘pregrado’—, sino para el posgrado. Aunque no en todos los casos, tiene que ser un elemento diferenciador y positivo para poder hacer una formación continuada durante el resto de tu vida profesional. Es un muy buen formato.

P.— ¿Qué ventajas cree que tiene la formación virtual?

R.— Tiene la ventaja de que es intemporal y puedes ponerte a buscar la información en el momento que a ti más te convenga. El hecho de que esté grabado te permite además volver a ver y escuchar aquellos detalles que te resulten más interesantes todas las veces que quieras. Por otra parte, no se puede interactuar con la persona que te está formando, algo que muchas veces es necesario, aunque para mí tiene muchas más ventajas que inconvenientes. No para todas las formaciones: con las que son puramente prácticas es más difícil que pueda funcionar, pero para las teóricas es muy interesante.